En el año 1983 la Junta Central Fallera decide viajar a la capital del Sena y junto a los valencianos residentes en París integrantes de la Casa Regional de Valencia, celebran una extraordinarias fiestas falleras con la “plantá” de una falla y una serie de festejos propios de una comisión.

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La fallera mayor de Valencia, mi querida amiga Begoña de la Concepción llegó a París con un representante de la Junta Central Fallera. Ni que decir tiene que la presencia de Valencia fue muy bien acogida y tanto valencianos residentes en París como los propios franceses acudían masivamente a los actos organizados, sobre todo a la cremá de la falla..

Sin embargo, la visita a Europalia en Amberes fue todo un éxito en cuanto a la promoción de Valencia y las fallas. La embajada fallera la encabezó la fallera mayor de Valencia, Esther Silleras Descalzo y su corte de honor; también viajaron los asesores de presidencia Jesús Maroto y Emilio Vitoria; los vicepresidentes Evaristo García, Rogelio Domiguez, Enrique Miñana y Ginés Blaya, junto al secretario general Pedro Maroto; delegado de relaciones públicas, Manuel Latorre; tesorero, Miguel López y el delegado de economía, Alfredo Prats. Toda la comitiva viajó en el barco “Ciudad de las Palmas” hasta Amberes; barco que sirvió de hotel a la Junta Central Fallera y fue punto de encuentro de muchos valencianos.

Como no podía ser de otra forma se plantó una falla, obra de Manolo Martín; el restaurador Galbis cocinó una paella gigante y la empresa pirotécnica Hermanos Brunchú fue la encargada del disparo de los fuegos que, según me relató hace años Juanjo Brunchú, tuvo la mayor medida de seguridad que se pueda uno imaginar. “La camisa no les tocaba el cuerpo al contemplar la cantidad de pólvora que teníamos preparada, por eso la enorme seguridad que rodeó la plaza”, señalaba Brunchú.

Durante su permanencia en Amberes, la Junta Central Fallera rindió homenaje a la figura de Luis Vives, colocando una corona de laurel ente su mausoleo en la ciudad de Brujas.

A la cremá de la falla asistió numeroso público, así como el alcalde, Ricard Pérez Casado y Joan Lerma, como presidente de la Generalitat.