El juez que levanta pasiones y odios, sobre todo en la actualidad, visitó nuestra ciudad en numerosas ocasiones, a nivel privado, dada su amistad con los entonces concejal Vicente Martínez Marco y el director general de Salud Pública, Francisco Bueno. Sin embargo, en las Fallas de 1993 fue el invitado oficial del Ayuntamiento.
Durante su estancia en Valencia, asistió al disparo de una mascletà, en el balcón principal del consistorio y confraternizó “a brazo partido” con destacados dirigentes del PP; presenció una corrida de toros en compañía de Fernando Giner y Serafín Castellano y visitó alguna que otra “escogida” comisión fallera. En otra ocasión visitó el Gremio de Artistas Falleros, cuyo Maestro Mayor, Salvador Gimeno, le hizo entrega del libro “Los escultores del fuego”; entrega en la que tuve el privilegio de estar presente en calidad de periodista del diario LAS PROVINCIAS.
La foto que inserto es de mi archivo particular, en la que se contempla la entrega del libro, y que ahora toma mayor protagonismo dadas las circunstancias por la que pasa el magistrado.
No fue esta la única visita a Valencia. Recuerdo su visita en 2001, año que recibió el premio “Cotorra del Mercat” y en el año 2002 en calidad de mantenedor de la Regina dels Jocs Florals de Lo Rat Penat que no era otra que la esposa del concejal y diputado Vicente Martínez Marco.