La historia que rodea a la imagen de la Virgen de los Desamparados sumergida antaño bajo las aguas del antiguo faro del puerto de Valencia y actualmente en una zona próxima al Real Club Naútico de Valencia, es muy poco conocida.

La Mare de Déu restaurada

A mediados del mes de mayo de 1977 el escultor Ignacio Cuartero Fernández, componente del grupo de buceadores del GISED realizó una imagen en bronce de la Mare de Déu que coincidiendo con los 30 años de creación del club se sumergió en las aguas del puerto de Valencia, a los pies del faro y a 15 metros de profundidad, tras ser bendecida por el misionero Agustín Martí, actuando como padrinos los niños Ángeles Pastor y Francisco José Bou y actuando como notarios extraordinarios el entonces comandante militar de Marina, Alfonso Gómez y Santiago Pons, en aquel momento presidente del GISED, según me contó mi buen amigo Rafael Graullera, presidente del Grupo de Investigaciones Submarinistas y Escafandristas Deportivos, conocidos popularmente por las siglas GISED.

Desde 1977 y con regularidad sistemática los buceadores realizan una ofrenda floral en honor de la Virgen, el segundo domingo de mayo, sumergiéndose y depositando flores alrededor de la imagen.

Esta pequeña historia devocional no quedaría completa si no destacasemos  que desde el año 1996  la Agrupación de Fallas del Marítimo, dentro de su semana cultural con motivo del 9 d’Octubre, viene realizando otra ofrenda floral en la que participan las comisiones agrupadas y como invitadas las falleras mayores de Valencia, cuyos ramos son sumergidos hasta los pies de la imagen por buceadores del GISED que colaboran con el acto que dicho sea de paso es francamente espectacular.

Pero la historia continúa. Los proyectos de ampliación del puerto y su adecuación para la Copa América dejaron la zona del antiguo faro cubierta por muelles, circunstancia que obligó a que la imagen fuese extraída del mar y tras la correspondiente restauración fuera de nuevo sumergida en otro lugar del puerto donde las ampliaciones no impidieran su visita en años siguientes.

Y llegó la fecha del 17 de noviembre de 2007, momento que la imagen fue extraída y expuesta en una urna transparente en los locales del GISED, donde tuve la oportunidad de contemplarla. En el mes de marzo de este mismo año y organizado por la Agrupación de Fallas del Marítimo la urna con la imagen se expuso en el Ateneo Marítimo.

A continuación, la imagen de la Virgen se depositó en los estudios de restauración GAIA, donde fue sometida a un proceso de limpieza, consolidación y protección con lacas especiales para evitar la corrosión del bronce.

El segundo domingo de mayo de 2009 la imagen volvió al mar, en esta ocasión se situó en el espigón exterior del Real Club Náutico y a 12 metros de profundidad. La restaurada Mare de Déu fue bendecida por el sacerdote y buzo del GISED Xavier Serra, en presencia de numerosos invitados, componentes del grupo de escafandrismo que preside Rafael Graullera, así como por el presidente del Real Club Naútico, Manuel Casanova.

Después de bendecir la imagen y rezar una oración por los fallecidos en el mar, se inició la romería naútica en la que participaron numerosas embarcaciones deportivas y varios barcos cedidos por el Club Naútico para el transporte de los invitados. Toda una celebración que pasa a la historia íntima de Valencia.