Hace 19 años en el firmamento hubo una conjunción de astros para que en mi hogar se viviese algo inesperado o mejor un verdadero cuento de esos de las mil y una noches: la alcaldesa Rita Barberá nombraba, en el hemiciclo del Ayuntamiento, a mi hija Lucía fallera mayor infantil de Valencia el mismo día de su onomástica, el 13 de diciembre: festividad de Santa Lucía. Bendita coincidencia!!

Aún recuerdo esa tarde-noche, creo que nunca la podré borrar de mi mente, entre otras cosas por haber sido el único padre en la historia, salvo error, que aguantó personalmente el acto de nombramiento de las falleras mayores de Valencia en el Consistorio. Algunos se preguntarán ¿por qué estaba allí? La respuesta es sencilla, muchos la conocen, pero para los que no lo saben les cuento.

Como periodista encargado de la sección de Fiestas y Tradiciones, habitualmente la información del nombramiento de las falleras mayores de Valencia en LAS PROVINCIAS era mi responsabilidad. Sin embargo, ese año al estar mi hija como candidata pacté con mi entonces directora María Consuelo Reyna que sí era mi hija la nombrada me iba a mi casa y otro compañero, en este caso fue María Ángeles Arazo que estaba conmigo en el Ayuntamiento, hacía la información. La alcaldesa Barberá nombró a mi hija fallera mayor infantil de Valencia y como no podía ser de otra forma salí disparado del Consistorio hacía mi casa que ya estaba invadida por falleros, en especial los de Reino de Valencia-Duque de Calabria, amigos y compañeros de los medios de comunicación.

Mi hijo, Manuel Rafael, también vivió esa noche junto a su madre, Encarna, la alegría de ver como su hermana se convertía en la reina de la fallas infantiles. Han pasado 19 años y cada vez me siendo más orgulloso de los hijos que tengo; dos personalidades distintas, pero extraordinarias, con un común denominador; su amor por las fallas. Creo que es lo mejor que he hecho en mi vida y a las pruebas me remito.

Hay mucho más que contar. Sin embargo, sólo he querido recordar la efeméride por lo que representa para mi familia.