Los valencianos en general y, sobre todo, los nacidos o habitantes del barrio de Ruzafa conocen que en la calle Pintor Salvador Abril llegando al cruce con la de Pedro III el Grande, se levanta un sencillo edificio que alberga a una institución que durante muchos años se convirtió en icono de la enseñanza: el colegio de Don Juan de Dios Montañés.
¿Cuántas veces hemos pasado por su puerta? Muchísimas, seguro. El fundado de esta institución no fue otro que el sacerdote Juan de Dios Montañés que falleció en nuestra ciudad un 10 de julio de 1890. Su larga vida estuvo dedicada a la creación de instituciones para la enseñanza que sufragaba con su herencia personal.
Durante muchos años fue director de la Casa de la Beneficencia. En la población de Godella creó un asilo-escuela para recoger a madres solteras o a jóvenes que querían abandonar la prostitución, creando también en la misma una escuela de párvulos para dar enseñanza gratuita a los hijos de las internas y a los niños de la zona. Esta casa, llamada después de “Villa Teresita”, ha permanecido en Godella hasta hace pocos años.
En el año 1877, creó el asilo de párvulos en lo que entonces era el pueblo y ahora es el barrio de Ruzafa. Escuelas gratuitas para los niños, niñas y adultos que han formado parte de la historia de Ruzafa y de Valencia en su más de un siglo de existencia.
El edificio muestra una lápida conmemorativa con el escudo de la ciudad; bajo el escudo podemos contemplar el busto en bronce del fundador. En el centro de la lápida se halla la siguiente inscripción: A don Juan de Dios Montañés. Pbro fundador insigne de esta benéfica casa-escuela. Sus alumnos agradecidos en el quincuagésimo aniversario de su institución. Año del Señor MCMXXXVII .